2/11/12

De periodistas y medios de comunicación

 

Los periodistas estamos acostumbrados a escuchar críticas sobre el trabajo de los colegas,  que son insensibles por grabar imágenes de familiares dolientes ante la muerte de un ser querido, que  son arribistas por utilizar su poder en la prensa para lograr beneficios del gobierno de turno, que son seres arrogantes  que han perdido el respeto por las personas, los valores morales y han olvidado la esencia de su misión, que es la de informar con imparcialidad y  con verdad.
Entonces surgen las críticas a los medios de comunicación y en especial a determinados programas de televisión. Pero claro, es en este contexto es difícil explicar que el mal uso de un medio de comunicación no descalifica al medio.
En estos días dos hechos vinculados al ejercicio del periodismo me han dado argumentos para reafirmar lo antes señalado.


El primero de ellos, es el actuar de dos vídeo reporteros Luis García, camarógrafo de TV Perú, y Luis Corrales (Chuto) de Canal N, quienes en el operativo policial en el mercado mayorista “La Parada” venían informando a la población sobre los graves sucesos que ocurrían en el lugar, y al ser testigos de actos vandálicos en contra de policías heridos y apedreados procedieron a defenderlos  poniendo en riesgo su propia vida. Como dice Claudia Cisneros en su columna De buitres y héroes, estos colegas permitieron  recuperar la buena imagen del periodismo y del periodista.
Gracias a la difusión en los diversos medios de comunicación de las fotos y  vídeos grabados ese día se viene identificando a los responsables y la justicia les dará la sanción correspondiente.



El segundo caso, fue un reportaje periodístico que realizó canal cuatro acerca de una campaña de INABIF “Ayúdamos a encontrar a su familia”, en la  cual se presenta a personas sin identificación para que los familiares los reconozcan y vayan a su encuentro. Lo que parece una probabilidad imposible, fue realidad,  Henry Zelaya  se enteró por el reportaje que su madre estaba en INABIF y fue a su encuentro,  la había buscado en las calles de San Juan de Lurigancho, en casi todos los hospitales de Lima y hasta en la morgue, “sentía que no podía vivir sin saber cómo estaba ella, mi vida no era igual”,  comentó. 
Eusebia Chamorrro es una mujer como de 80 años, es sorda y muda, no podía dar referencia de su procedencia. El día del reencuentro ella estalló en llanto, acarició a su hijo y no dejaba de abrazarlo. No podía hablar, pero su llanto y su mirada lo decían todo. Los presentes, no pudimos contener las lágrimas de emoción y alegría al presenciar el emotivo reencuentro. Ella en INABIF era muy bien cuidada, pero necesitaba del amor de su hijo, como dice el slogan “ni el mejor de los centros de atención sustituye a una familia”

 
 El periodismo desde sus distintos ámbitos ha cambiado la vida de un país, de un pueblo, y ahora cambiaba para bien  la vida de estas personas. 
Los medios de comunicación, bien usados, son una necesidad de la sociedad y de la humanidad